jueves, 31 de julio de 2008

Carta de los lectores

Estimado señor Gordi.
Primero quiero felicitarle por la noble labor que realiza a través de este medio con sus lectores, como yo, que buscamos una solución a problemáticas con las convivimos diariamente. También quiero felicitarlo por asistir siempre a las charlas de apoyo grupal y por su aporte a nuestra comunidad. En esta ocasión le escribo porque me encuentro en una situación muy difícil. Mi familia es muy normal, tengo 6 hermanos y mis padres son personas de bien, respetadas en el barrio y pues, nunca hemos hecho nada desleal ni mucho menos. De mis 5 hermanos, tengo 2 hermanas ya casadas y el resto son varones. Yo no me he casado pero tengo un novio. Un chico que me dice que me ama y que soy su sol. Yo siento que lo amo con locura, y que no puedo vivir sin él. Mi problema señor Gordi, es que mis papás y demás familia, incluso mis tíos y abuelos, no aprueban nuestra relación, pues no les cae bien mi novio. Por el trabajo que realiza. Yo cuando leí la carta anterior del chico que no se atrevía a decirle a su novia que era un modelo de anuncios para los hongos de los pies, pues me sentí identificada pues es algo parecido lo que yo estoy viviendo ahora con mi relación. Sólo que en mi caso a mi no me importa el trabajo de mi novio, aunque mis papás no lo acepten. Verá señor Gordi, es que mi novio es un policía oficial de tránsito, o sea que trabaja en Emetra. Y antes cuando llegaba a la casa a verme, yo lo invitaba a cenar con toda mi familia y el ambiente era muy tenso, nadie le hablaba y todos le hacían la mala cara, por eso decidimos mantener nuestra relación al margen de mi familia. No se qué hacer señor Gordi con esta situación, porque pienso, ¿qué haré si decidimos casarnos? ¿Cómo voy a hacer para confesarle a mis padres que el padre de sus nietos es un policía de Emetra? ¿Y si tengo que invitar a sus compañeros a la boda, nadie va a querer tomarse un traguito por miedo a que los multen al salir de la fiesta? No lo se. Estoy desesperada, yo le pido de corazón que me conseje.

Atentamente
Corazón con Cepo.


Sr. Gordi:
Querida lectora, primero que nada le aconsejo que se relaje y le vea el lado bueno a la situación, piense que está saliendo con la autoridad (en lo que a tránsito vehicular se refiere), por lo que nunca en su vida va a experimentar que le pongan un cepo o remisión. Ni siquiera que le pasen el alcoholímetro, lo que puede ser verdaderamente una carga menos de qué preocuparse en la vida. Segundo, usted puede ser honesta con sus padres y plantearles su situación. Ellos seguramente entenderán. Por otra parte lo más importante es que usted luche por su propia felicidad, pero trate de no ir muy rápido, porque ahora hay cámaras en las avenidas principales. Su novio de eso me imagino que sabe mucho. Y por último, dese un tiempo para meditar la situación y poner su relación en perspectiva, proyectarse a futuro le podría ser muy útil para visualizar su vida. Imagine lavando chaquetas de nylon verde fosforescente el resto de su vida. O jamás poder llevar a sus hijos a los carros locos de las ferias. ¿Usted quiere eso para toda su vida? ¿Es tan fuerte el amor que siente por su novio? Estudie los pros y contras de ser la esposa de un PMT y láncese en contra de la vía si es necesario. Espero que esta humilde opinión ayude a calmar esa pena que lleva en su corazón con cepo. Sobre todo porque al amor no se le puede poner remisiones ni multas. Sólo luz verde y pasos y pedales.

1 comentario:

Anónimo dijo...

buenisimo GOrdi en serio!!! jajajaja falta la carta de la hija del ALcalde Auxiliar de la Zona!!! jaaj Mi papá!!! huy amigo gruessoooo!!! jajaja